La educación para la sustentabilidad debe incluir lo emocional y filosófico: Blanca E. Gutiérrez

*La especialista impartió la quinta charla del seminario virtual “Sostenibilidad en Diálogo”, organizado por el Centro Universitario de Gestión Ambiental.
Lo emocional, íntimamente vinculado con lo filosófico, no puede quedar fuera de la educación orientada a la sustentabilidad, afirmó la bióloga y educadora ambiental Blanca Estela Gutiérrez Barba, integrante de la Academia Mexicana de Educación Ambiental.
Durante su participación en la quinta charla del seminario virtual “Sostenibilidad en Diálogo: Seminario para sembrar ideas y cosechar soluciones”, organizado por el Centro Universitario de Gestión Ambiental (CEUGEA) de la Universidad de Colima, Gutiérrez Barba señaló que la dimensión filosófica debe incorporarse junto a la investigación y la docencia como parte de los modelos de sustentabilidad, que integran las dimensiones económica, ambiental y social.
La especialista dijo estar convencida de que toda educación enfocada hacia la sustentabilidad “debe tocar lo emocional”, pues sin pensamiento, reflexión ni meditación filosófica sobre el ser, el estar y el hacer, las acciones terminan siendo únicamente instrumentales y operativas, es decir, “efímeras y epidérmicas”.
No debe comprometerse el futuro
En su exposición, la doctora en Biología por el IPN compartió su modelo teórico, en el cual lo filosófico ocupa un papel central dentro del pensamiento y de la educación. Citó el informe de Jacques Delors, elaborado para la UNESCO en la década de los noventa, que planteó la educación como un tesoro que debe permitir “aprender a hacer, a convivir, a ser y a trascender”, no sólo a hacer.
Al abordar las necesidades de las generaciones actuales, subrayó que éstas no deben comprometer las posibilidades de las futuras. En ese sentido, explicó que, en contraste con la tradicional pirámide de necesidades de Maslow, investigaciones recientes muestran que los jóvenes universitarios están explorando nuevos modelos de bienestar.
Gutiérrez Barba mencionó que un estudio realizado con estudiantes de licenciatura reveló la importancia de las necesidades afectivas, estrechamente relacionadas con la emocionalidad. A partir de ello, retomó el modelo de Manfred Max-Neef, quien propone una serie de necesidades humanas fundamentales, como son la subsistencia, protección, el afecto, entendimiento, participación, ocio, creación, identidad y la libertad, sin establecer jerarquías rígidas entre ellas.
Definir lo que realmente es necesario
“Debemos debatir quién define lo que necesitamos y si es necesario jerarquizar o no. Lo importante es identificar las necesidades reales, porque a menudo las confundimos con sus satisfactores”, puntualizó.
En este sentido, aclaró que cuando una persona dice “necesitar” un celular, lo que en realidad requiere es comunicación o sentido de pertenencia, pues el teléfono es sólo el medio que satisface esa necesidad.
Como parte de su aportación, Gutiérrez Barba destacó la relevancia del concepto de Bienestar Auto-reportado (BIARE), propuesto por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y aplicado en México por el INEGI desde 2012.
El BIARE busca medir el bienestar más allá de los indicadores objetivos tradicionales -como el PIB, la esperanza de vida o el acceso a la educación- y se centra en cómo se siente la persona con su vida. Evalúa tres dimensiones: Satisfacción con la vida, balance afectivo (emociones positivas y negativas) y eudemonía (sentido de vida y realización personal).
Además, añadió la investigadora, el instrumento considera el dolor, la felicidad y la edad como factores que influyen en la percepción del bienestar, siendo los jóvenes quienes suelen priorizarlo más.
Blanca Estela Gutiérrez Barba estudia la emocionalidad, espiritualidad, estética y formación en investigación. Ha recibido múltiples reconocimientos, entre ellos el Incentivo al Desempeño de Investigadores. Cuenta con una amplia producción académica: 30 artículos, 29 capítulos de autoría, 14 libros de coautoría o edición, una patente, un diseño de utilidad y seis registros de derecho de autor.
Se ha desempeñado como funcionaria en los sectores público y privado, y actualmente forma parte del Consejo Mexicano de Investigación Educativa y de la Academia Mexicana de Educación Ambiental.
Próxima charla del Seminario
La siguiente sesión del ciclo “Sostenibilidad en Diálogo: Seminario para sembrar ideas y cosechar soluciones”, se realizará el próximo 23 de octubre, a las 12:00 horas. En ella participará Rafael Tonatiuh Ramírez Beltrán, de la Universidad Pedagógica Nacional.
El registro previo está disponible en https://goo.su/8RcEA. Más información en el Facebook del CEUGEA.